12.07.2007

Mail

De: zarana999@hotmail.com
Enviado el: Viernes, 30 de Noviembre de 2007 07:51:11 p.m.
Para: ahoraveras@hotmail.com
Asunto: Un desafío en serio

Te hago un desafío. Lo protobauticé "24 horas del siglo XXI: una experiencia cinéfila". Consiste en lo siguiente...

A las 19 (diecinueve) horas, aprox., de algún sábado postfinales, alquilamos en Picadilly (sitio cinéfilo por ontonomasia) 12 (doce) películas de una duración promedio de 2 (dos) horas cada una. Nos encerramos en algún lugar a convenir y las vemos una tras otra, sin interrupciones, hasta las 19 (diecinueve) horas del día siguiente (domingo).

CRITERIO DE SELECCIÓN DE PELÍCULAS: A CONVENIR. El único requisito indispensable es que la duración acumulada sea de 24 horas. Sólo a modo de sugerencia, propongo una secuencia entre películas "sofocantes" y las que intintulo provisoriamente "bocanada de aire patagónico" (ej. de serie: W. Herzog - W. Anderson - J. L. Godard - A. Payne - I. Bergman). Insisto, también, en que ninguna de las películas escogidas haya sido previamente vista por ninguno de los dos.

REGLAS PARA LA VISUALIZACIÓN (NO SUJETAS A DISCUSIÓN):

1) La experiencia durará 24 horas, más los tiempos muertos (de ahora en más, TM) que surjan de sacar un dvd del reproductor e insertar otro, que deberán ser reducidos a su mínimo indispensable.
2) Los únicos contactos con el mundo exterior serán: A) chequear mensajes y/o llamadas perdidas (que eventualmente podrán ser respondidas previo acuerdo mutuo sobre su urgencia) a los celulares que serán prendidos sólo durante los TM; y B) una única salida al exterior, cuya duración no podrá superar, estrictamente y bajo ningún punto de vista, los 5' o lo que se tarde en dar vuelta la manzana.
3) El pertrecho de víveres y otros elementos imprescindibles (cigarrillos, papel higiénico, etc.) deberá efectuarse previamente o en el transcurso del inciso B) del ítem anterior (siempre y cuando la manzana del lugar de visualización esccogido contenga un almacén de ramos generales u otro sitio dispuesto para tal fin).
4) Dado que el redactor de este reglamento considera que mientras se duerme el inconsciente asimila los estímulos que a uno lo rodean, se podrá dormir durante la visualización. Pero esta dádiva normativa implica una restricción sinequanon: pase lo que pase, el flujo de películas no podrá detenerse JAMÁS (este reglamento sugiere la implementación de un reloj despertador o alarma programado para el fin de cada film en vistas de cumplir dicha restricción).


Considérese desafiado.-